27 de julio 2009
Animados por la experiencia de otros grupos, que han efectuado jornadas de práctica en La Naturaleza, decidimos acabar este curso 2008-2009 con una actividad similar.
Para ello elegimos la senda que sube a la Foz de los Moñacos siguiendo el curso del río Espinaredo , la cual sale del area recreativa de Riofabar próxima a Infiesto.
A las 11 de la mañana del sábado 27 de julio, nos reunimos nueve personas dispuestas a caminar y contemplar.
El día fue soleado y el paisaje maravilloso. El río, los pájaros y el hayedo hicieron que alternasen los sonidos y el silencio.
Esto fue el fondo y el acompañamiento para nuestra experiencia.
A lo largo de 8 horas caminamos a un ritmo tranquilo, manteniendo una distancia y una proximidad entre nosotros y lo fuimos alternando con sentadas de 25 minutos y practicas de Gi-gong y Tai-chi en claros del bosque.
También descansamos para comer.
En el cambio de impresiones al final de la tarde, compartimos que había sido muy positivo para todos y para celebrarlo acabamos en Espinaredo alrededor de queso y sidra y redactando esta crónica, para que todos los que la leáis ,os animéis la próxima vez.
Nuestra programación habitual de zen puede verse enriquecida por la experiencia y la ayuda de La Naturaleza.
"Sé el silencioso capullo de una flor en el seto,
Todos los sabados en la calle Alfredo Truan de Gijón,
La mayoría de la gente está dormida. Las personas nacen dormidas, se casan dormidas, educan a sus hijos dormidas y mueren dormidas. Ni siquiera se han percatado de que existe el estado de estar despierto. Por ello, todos los caminos espirituales se refieren la conciencia cotidiana como a un estado parecido al sueño. El que despierte se encontrará en un mundo nuevo.
No es preciso buscar la verdad,
